¿Es que no hay nada bueno en "Buenos" Aires? Parte 1

No hay paz, no hay tranquilidad, no hay trabajo, no hay guita, no hay piedad; en cambio, hay quilombo, hay pobreza, hay inflación (aunque los datos oficiales digan lo contrario), hay smog, hay mala leche (mufa), hay esclavizacion (aunque le paresca mentira), hay caos general.

Buenos Aires se convirtió desde hace muchos años un quilombo de ruidos, mal olor, resentimiento entre las personas, odio a la vía publica,etc. Podría agregar tanto adjetivos que nos describen a nosotros, pueblo argentino, que gastaría todo el espacio de la hoja del blog.

Basta ya. El pueblo, empezando desde abajo se tiene que unir y empezar a tolerarse un poco mas; dejarse ya de la pelotudez de que si es "rubio", "negro", "groncho", "cheto", o "concheto"; para acabar con los arreglos, la corrupción y dejar de aparentar, como hicimos siempre, y de esconder los defectos para arreglarlos, charlarlos, debatirlos, discutirlos, pensarlos, mejorarlos.

Caos en las calles y avenidas: Ya nadie respeta a nadie, todos se putean y se mandan a la mierda, en un ataque de nervios corriendo para cagarlo/a a trompadas. En las autopistas, avenidas, y calles muy transitadas te podes comer tranquilamente una o dos horas clavado con el coche/colectivo/micro (lo que fuere) y seguramente juntas una bronca terrible.

Pero a esto no hay que echarnos las culpas entre nosotros, es un tema de edificacion mal organizada. El otro día justo enganche en la television (me parece que era Canal 26) un archivo del año 1989, en que hablaba de la mala edificacion en zonas como el centro; en la mala ubicación de los edificios y su altura y anchura (por llamarlo de alguna manera); en la época de Menem, ¡de Menem!, ¡que cagada no hizo ese viejo hijo de puta!. Perdón, cagada para nosotros, conveniencia para el.

Caos en escuelas publicas: ¡Ay, dios mio!, ¡Que barbaridad, en mi época eso no pasaba! dicen las mismas viejas forras de siempre. Y yo, su humilde servidor, como siempre les digo: ¡esto siempre paso!; o sea, no siempre se le bajo los pantalones al profesor en plena clase, se le puso un preservativo y la posterior quemada en la cabeza, ni se la empujaba patoteandola; pero que siempre hubo un docente que los alumnos tomaban de boludo, en todos los años, en todas las épocas. ¿Ok?

Yo, personalmente, defiendo a muerte la escuela publica, ya que estoy cursando un establecimiento de Boulogne (no del mejor), y a los directivos y los preceptores mas o menos se los respeta, siempre sobrandolos, pero quien no ha gastado a algún personal del colegio. Bueno, no voy les voy a chamullar un camelo, la educacion publica es mala, es verdad, pero es educacion publica al fin, y aunque quede poca, hay. Es la educacion de los que no tienen los medios económicos o sociales (tales como la discriminación) y gracias a esa educacion los que menos tienen pueden tener mas.

Si has leído hasta aquí te agradezco, y si te parece correcto este tipo de pensamiento, alza la voz que te van a escuchar, y ya hay otros como vos, como yo, que estoy ¡levantando la voz!.

Alan Marro.